En comunión con los cristianos de Irak.

Han orado por la Iglesia y los cristianos iraquíes. Miles de personas se reunieron en Belén, en la Iglesia de Santa Catalina. Una gran participación para recordar a las víctimas inocentes de la masacre ocurrida el 31 de octubre a manos de militantes de Al-Qaeda, uno de las peores contra cristianos desde la caída del régimen de Saddam Hussein, frente a la Catedral siro-católica de Nuestra Señora de Bagdad.

SIC

Con una liturgia eucarística de rito sirio, mons. Grégoire Pierre Melki, exarca del Patriarcado de Antioquia de los Sirios, celebró el recuerdo de las 58 víctimas, entre la cuales mujeres, niños y tres sacerdotes. Junto a él, en la celebración, se encontraban dos frailes franciscanos iraquíes. Pero la liturgia estuvo también apoyada por las oraciones del delegado apostólico, mons. Antonio Franco, la mayor parte de los Ordinarios de Tierra Santa o sus representantes, una cuarentena de sacerdotes y muchos obispos y sacerdotes ortodoxos, sirios, griegos y armenos.